Por el otro lado ya tenemos a una persona que hasta el premio Nobel podría recibir, ¿entonces qué es lo que realmente se anda buscando, si de paso esta persona pisotea por donde puede nuestros derechos humanos y nadie dice nada y nadie se da cuenta de nada? ¿Dónde está la lógica o el sentido de tales acciones? ¿Qué es lo que se quiere mostrar? ¿Cuáles son los parámetros para definir quién hace algo por la imagen de la patria? ¿No sería mejor ver quién hace algo por mejorar la vida en Bolivia, porque de su imagen nadie vive, llena sus barrigas, sus bolsillos para comprar la marraqueta diaria…?
Y esta acción muestra nuevamente nuestra miopía mental, nuestra amnesia galopante, nuestra ignorancia, nuestra forma indiferente de ver y entender las cosas… Porque no hace mucho salieron 1500 personas de lo poco que tienen para defender sus derechos y esas personas llegaron a La Paz, en paz, sin violencia, nos mostraron su grandeza, su forma de entender la vida, su forma de pensar, de actuar, de sentirse parte de su medio ambiente, de ser “bolivianos”… ¿Y dónde quedaron los nombres de estas personas, en especial después de la provocación, de la pateadura? A la mierda con los verdaderos héroes, lo que necesitamos son lagrimones estilo mexicano… que duren 45 minutos por día, esos son los que hacen algo por la imagen, por la imagen de los que consumen, consumen información de dónde sea, porque lo primordial es no ver la cruda realidad diaria….
A este paso a ¿dónde vamos? ¿Queremos construir un mundo imaginario, virtual, donde solamente existen bolivianos exitosos, mientras 2 millones viven en la miseria? ¿O queremos construir un mundo donde el narcotráfico no juegue ningún rol importante? Pongamos las cosas tal cual son, aprendamos a decir las cosas como son, pero obviamente ¿qué conseguimos con eso? Nada, porque los dueños de nuestra realidad, tienen otro guión, donde la verdad, honra, honor, patriotismo, civismo, paz, solidaridad, desarrollo y muchas palabras más, simplemente ya no existen.
El nuevo vocabulario boliviano se quedó simplemente con palabras de adorno, con palabras de salón, donde los honorables en sus trajes de gala aplauden y sonríen después de escuchar los cuentos de las mil y una noches, de una historia inhumana, pero como lo importante son las palabras bonitas y no su contenido o el mensaje de la realidad, que no puede ser ocultada con ninguna frase en ningún idioma, pues ahí vamos buscando a los bolivianos que hacen algo por la imagen de… cada cuál hace algo por su propia imagen y punto, y no vengan con pajaronadas…
1500 personas y no están en esa lista de los buenos bolivianos, ahhhh claro pues, no saben jugar fútbol, ni son físicos nucleares o químicos-bio-genéticos super genios, tampoco tienen 100 dólares de ahorros y sus casas no cumplen ninguna ISO norma, ah por eso son gente que no debe aparecer en ninguna lista como gente, con nombre, apellido, sentimientos, deseos, cualidades…. Solamente cuentan los que tienen éxito….
Yo diría que hasta ahora vi a poca gente que hizo algo por su país, pero a estos 1500 no puedo hacerme al pendejo y decir que no existen o existieron, ellos son los que nos dieron La lección de nuestras vidas… tan pronto nos olvidamos, tan pronto los traicionamos… porque el olvido en este caso, es la peor traición.
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