Bueno como ya es costumbre a ponerse un nuevo peinado, una sonrisa diferente y a empezar con los deseos, con las promesas, con todo aquello que cada año hacemos, porque de alguna forma creemos que justo a las 24:00 las cosas han de cambiar, así por magia, por el amor a la camiseta, pero bien sabemos que las cosas no cambian solas, que para cambiralas hay que hacer algo, o tal vez mucho...
Por eso debe ser que
nos asustamos y volvemos a caer al ritual de despedir al año viejo y festejar
al año nuevo, porque es mejor que el año nuevo asuma nuestras
responsabilidades, para que el cambie nuestras vidas, nos haga flacos, rubios,
lindos, inteligentes, nos cure nuestros males, nos de las mamitas necesarias,
nos llene no solamente la billetera sino también los estómagos y si se da, que
nos de un buen trago, para ir de parranda en parranda ya que la vida es linda,
la vida es un carnaval...
Asi que el 2014 que
sea diferente, que ya dejen de regalar canchitas de fútbol y nos regalen un aginaldo por todo el año así dejamos de ir
a trabajar y podemos invertir la platita en prestes y así hacer que la economía
interna marche y marche y de trabajo a esos millones de desempleados, de techo
a esos millones de miserables que andan por nuestras calles, viendo como poder
sobrevivir mientras unos cuantos van contando que la vida es rosa y nuestra
democracia el paraíso terrenal.
Claro que hay que
tener esperanzas, sueños, metas, pero otra cosa es seguir creyendo en todo aquello
que nunca ha de pasar, por mas que lo repitan miles de veces, la vida no cambia
porque unos cuantos jueguen a ser lo buenitos, sin saber lo que es bueno o
malo. Pero a eso hemos llegado, a entregar las riendas de un país a un grupo
que no sabe a donde ir, a pesar de que ellos podrían cambiar las cosas, pero
como ya lo dije, si no saben cómo cambiar las cosas, entonces ¿qué pueden
hacer?
Nada solamente show,
así como el show que hacemos nosotros cada fin de año, porque en realidad
nosotros tampoco sabemos hacia dónde ir,
porque el saberlo significa asumir responsabilidades, significa arriesgar un poco, significa dar la cara y por
sobre todo dejar de ser los amputados mentales que solamente silban cuando los
otros soplan por sus culos...
La vida va y viene,
nos da miles de oportunidades para demostrar lo que relamente podemos, pero ahí
dejamos que los años pasen y pasen y las cosas sigan como siempre lo fueron.
Muchos dicen que así es el destino, que todo está en las manos de Dios,
entonces si es así para ¿qué hacemos el
teatro del fin de año?
Seguramente porque así aprendimos a comportarnos, a ser sociales, a demostrar
que “no venimos del monte”, es decir que somos gente que sabe lo que hace, lo
que piensa, lo que dice, lo que siente y lo que va construyendo o no.
Pero nuestros hechos
demuestran claramente que no es así, porque definitivamente los colegios,
escuelas, institutos, religiones, universidades, sociedades no nos eneseñan lo
que es la vida, ni lo que es necesario para hacer de esa vida algo bueno, es
por eso que nos llenan los cerebros con tanta mierda, que la vamos rumiendo año
por año y lo triste de todo es de que no logramos digerirla ni cagarla...
Ahí vamos con las
nuevas promesas, para ser mejores, esperando que la mejora venga después del
cuarto champancito y la picanita este deli... Ok así debe ser nuestro destino o
la voluntad del Señor y ojo entiendan bien...
la voluntad del Señor, tiene otro significado... a ver si nos
entendemos. Salud!