Estamos en el punto de convergencia, donde lo ilegal es convertido en legal, donde lo increíble se convierte en creíble, donde las fantasías se convierten en realidad, donde la justicia se convierte en injusticia, pero una injusticia legal, donde uno, una vez caído en ese laberinto, no tiene salvación, porque las reglas están siendo de tal forma definidas que no tienen nada que ver con lógica, con humanismo, con democracia, ética, moral o justicia. El nuevo aparato opresor va tomando cara legal, apoyado por gente de carne y hueso como todos los demás, pero con esa ceguera dogmática política que nos convierte en enemigos y así dejamos de ser vecinos, compatriotas.
Las leyes le lavan las patas embarradas, las leyes le dan un salvoconducto, ¿pero podrán esas leyes limpiarle la conciencia? ¿Tendrá este tipo de gente conciencia o algo que funcione en sus cerebros y les diga que lo que hicieron estaba mal? ¿O será que esa culpabilidad nos fue enseñada para poder manejarnos mejor? ¿Por qué tendremos que sentirnos culpables, si los que nos gobiernan niegan donde pueden su culpabilidad… su responsabilidad? ¿Por qué tendrá un pueblo que pagar los errores de sus gobernantes? ¿Será esa una característica de la democracia? ¿Será esa una característica humana, tener que dar las mejillas hasta que nos revienten el cerebro?
La masa tiene muchas características y una de ellas es, de que una vez dividida hasta que reaccione pasan muchos años, décadas o siglos…a pesar de que todos ven de que lo que pasa está mal, es incorrecto, es injusto y parece que el miedo es un elemento vital para que nos tengan ahí como un simple rebaño, que es sacado a que coma, que le dan para rumiar los lemas de siempre, unas horas para Kgar y reproducirse y cuando llega la hora de llevarnos al matadero , pues ahí estamos sabiendo que eso está mal… pero ahí estamos. Porque nos vienen diciendo que así es la democracia, la forma más alta en la política…
Nosotros les damos la superficie para que ellos construyan lo que les venga en gana, para que ellos vivan según sus conveniencias, según sus caprichos, según su política que puede ser la peor basura… y nada nos hace cambiar, porque bien nos enseñaron que cuando en la tierra la injusticia humana reina, pronto ha de llegar la justicia celestial y los malos serán castigados y los buenos vivirán al lado de nuestro creador… ¿Será por eso que tenemos tanta paciencia? ¿Será que así podremos explicar nuestra indiferencia? ¿Será que así podremos lavarnos las manos, como a ese ministro acaban de lavarle las patas de barro?
A los del TIPNIS los patearon sin sentido, sin ninguna razón y ahora resulta, de que no hay culpables, de que un ministro que no tuvo el control de su ministerio, no puede tener la culpa, ¿pero si uno no tiene control… no demuestra que es incapaz, no demuestra que no sabe, no demuestra que ignora lo elemental para poder ser ministro? ¿Y si ahora tenemos ministro que ignoran de sus cargos… quién debería tener la responsabilidad política de toda esta mierda?
Nadie, porque El Gobierno es algo ajeno a las personas que lo conforman, eso acaba de decidir nuestra justicia…
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