....Más orgullosos de ser bolivianos....

La palabra orgullo, realmente es enredada porque tiene un sabor bastante raro, personalmente la uso poco, y después de leer lo que escribió Paz Soldán peor la cosa... Porque al parecer para estar orgullosos no importan los motivos o no motivos es decir que una madre prostituta está orgullosa de que su hija sea más prostituta, un padre cogotero está más orgulloso de que su hijo sea más cogotero que él, y bueno nosotros debemos estar más orgullosos como bolivianos después del fraude electoral, después DE LA PATEADURA, después de los muertos pillados en calzoncillos, después de tantas cosas... que en realidad no deberían pasar, pero pasan y se convierten en diarias.

Y bueno como de algo hay que estar orgullosos, entonces seguiremos con los linchamientos, con las matufias, con todo aquello que creíamos que eran atributos de las dictaduras, de los milicos, de los paramilitares, pero ahí siguen y como ahora regalan computadoras, campos de fútbol, nacionalizan para luego pagar millones de... derecho a nacionalizar.... pues debemos estar orgullosos de ser tan pelotudos, claro que de eso nadie puede estar orgulloso ni acá ni en la luna, por hacernos mamar una y otra vez.

Y cuando gente importante abre la boca y dice Kgadas pues a ponerse orgullosos, de que esas personas traten de camuflar la realidad, porque es mejor vivir en cuentos, en mentiras, en abstracciones a vivir en la realidad, esa realidad donde la palabra orgullo, dignidad, no existen. ¿Podremos estar orgullosos de que en nuestro país los niños a partir de cierta edad puedan trabajar legalmente, por ejemplo en las minas? Uhm jodido, y ni que hablar de los Lustra-Botas o Bota-Basura o de los cleferos, pero como de eso no se trata, porque la política, en especial la nuestra, no tiene tiempo para las cosas importantes de la vida, pues jodimos, jodimos, porque la cadena de mando se rompe cada vez que ellos quieren.

Nada nuevo, realmente nada nuevo en nuestro país y mientras las estadísticas digan que por suma y división la gente tiene más plata, pues algún día, según los números, seremos todos los bolivianos ricos.... y eso es realmente bueno, ser ricos según el papel, porque la realidad nunca es para todos, claro la miseria sí lo es, pero todo lo demás no. Y como el papel aguanta todo, entonces seguiremos por el camino se siempre, con nuevos filósofos, pensadores que nos digan que todo está bien, que la vida es rosada, la luna de queso y el arco iris una cadena de diamantes para todos aquellos que puedan saltar al cielo y agarrarlos.

Y ahí vamos saltando, vamos babeando al ver la luna y no tener un pan que comer, vamos a las urnas creyendo que es la lámpara de aladino, que cuando salga y vea que fuimos buenitos los cinco años pasados nos dará tres deseos para poder dejar la miseria en la que vivimos o viven muchos, claro esos muchos no son bolivianos, porque las estadísticas nos muestran de lo que realmente debemos estar orgullosos.

Y claro a algunos les dán muchos deseos, a otros unos cuantos y así siguen con los regalos para comprarse la lealtad, y se olvidaron que cuando Banzér se quedó con los bolsillos vacíos y con grandes huecos, los cuarteles empezaron a murmurar y luego lo bajaron así como siempre bajaron a todos esos vende mentiras.

¿Podremos estar orgullosos del abrazo de Charaña o de lo ocurrido en la Harrington? Seguramente sería bueno poder preguntarles a todos esos que murieron por su patria, si de alguna forma están orgullosos de ser bolivianos, sin importar que sus asesinos sigan paseandose por las calles de estas ciudades maravillas.

Orgullo una palabra sabor a mierda... en este caso.