Y así vamos escribiendo un nuevo capítulo de la telenovela “ Y Bolivia no puede morirse de una buena vez” y este melodrama es tan taquillero que ya dura desde 1825... y cada vez con nuevos protagonistas, comparsas y pelotudos, pero el guión sigue siendo el mismo y se repite, solamente que los sofismas cambian, que los “indios”, que los comunistas, que los derechistas, que los maricones, que los infiltrados y según la palabra de moda el rebaño rebusna y se mueve contra la derecha, la izquierda, arriba y abajo, según el antojo del nuevo dueño del escenario.
Y como nos enseñaron bien a no pensar y solamente podemos repetir como disco rayado lo que nos dicen que repitamos, pues ahí anda nuestra democracia, si es que así podemos llamar al sistema político actual, de un bache al otro, de un susto al otro, de un paro al otro. El pueblo debe salir a hacer frente a los paros y marchas, es la orden actual, pero como ya estamos tan mareados ya no sabemos cual es la marcha pro o en contra de qué, o quién tiene razón y quién no la tiene y si salimos a pararlos ¿a quienes tendremos que parar? ¿A las marionetas en las calles, a los opresores en verde o a los que están detrás del telón y jalan los hilos?
Entender de que el actual gobierno electo fue error, significa que hicimos un error hormonal garrafal que podría haber sido evitado si en su tiempo hubiéramos entendido que la democracia va más alla de unas simples cruces. La democracia es una definición en nuetras mentes, en nuestros ideales, en nuestros corazones y como más nos gustaron los presteríos con golpes y boinas verdes pues ahí vamos tratando de aprender lo que es una democracia militante... ¿Pero podrá existir algo así, si el gobierno se dice demócrata y nos da palo por detrás?
El contexto en el que vivimos estaápodrido y por lo tanto la semántica también y en ese enredo de definiciones nos salen con nuevos-viejos sofismas, sabiendo muy bien, que nos volverán a mamar y así de fácil estaremos enfrentándonos, porque no tenemos la capacidad de pensar seriemente en todo lo que pasa, nos dicen, en la forma en la que se comportan. En un sistema corrupto no puede existir una democracia, en un sistema podrido solamente pueden sobrevivir los gusanos, en un sistema moribundo solamente podemos prender velitas, porque la ignorancia es incurable, por más que nos regalen por toneladas títulos honoris causa de todas la universidades de este planteta, el tener un título en papel no significa que nuestros cerebros funcionen o que nuestro intelecto sea capáz de escaparse de esas cárceles virtuales, llenas de sofismas y mentiras ideológicas.
Si dan la orden para que el pueblo salga a las calles a defender sus derechos, es una orden directa para la confrontación, ¿pero que poder tiene Linera para decir tales cosas? El que sea vice no significa nada, mientras esté pisoteando la dignidad de su pueblo, de ese pueblo que le dió la tarea de velar por nuestros intereses... nuestros intereses y no los suyos y al decirnos que salgamos a las calles, solamente quiere que velemos sus intereses en nombre de la justicia, democracia plurinacional y demás cuentos chino, cubanos, venezolanos o de donde diablos vengan.
Espíritus pobres siempre llegaron a envenenar la vida, siempre llegaron a usarnos, a hacernos enemigos, a hacernos criminales o víctimas y nosotros seguimos en el rol que escribieron, hace mucho, para nuestros antepasados. ¿ Y de qué sirvieron los colegios, escuelas, universidades, iglesias, cuarteles o burdeles? De nada, porque ahí seguimos por el sendero que ellos construyeron, por el sendero luminoso lleno de mierda y nosotros tercos como somos no queremos entender que el cuento se ha acabado, que este gobierno se derrumbó solito, sin que nadie les corte la silla...
La realidad es dura, nada más que eso y si no queremos entenderla, pues que nos sigan jodiendo y ya...
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