domingo, 19 de junio de 2011

Operación incógnito


Bueno ya que el diálogo puede durar muchos ciclos lunares, decidieron por medio de la operación incógnito, recuperar nuestra salida al mar simplemente con 14 SEALs bolivianos. Más no se necesita , dijeron los brujos al leer la coca y lanzar al aire unos tawa tawas, y como los dioses no dicen nunca mentiras, entonces se interpretó lo que se interpretó y nuestros especialistas se fueron con la meta ya definida. Victoria o muerte, más no hay, pero como en la vida hay sombras que nadie puede interpretar, nuestros valientes compatriotas  en vez de llevar su armamento verdadero, se fueron con sus rifles de agua y pistolas a pilas que dicen BANG BANG.

Y ahí no paró la cosa, porque ni bien pasaron la frontera, fueron aprendidos por policias del otro lado, y claro cómo no podía haber pasado así, si nuestros SEAL se fuerno con sus trajes de bailarines del Gran Poder, porque creyeron que así los dioses estarían con ellos. Ahora no le queda otra, a nuestro presidente, escribir una disculpa, por... por... esa disculpa sí que la he de leer palabra por palabra y a ver como sale de este embrollo el primer mandatario, porque acá no puede decir que le patearon la canilla, o que fueron los derechistas del ejercito, porque si nos acordamos un poquito nuestros militares son también comunistas desde hace poco.

Bueno quién sabe que pasó en realidad, pero espero que por lo menos rueden algunas cabezas, porque hay cosas que NO se puede hacer en territorio ajeno, porque esa mala costumbre de hacer lo que les venga en gana en nuestras tierras y sobre nuestras cabezas, solamente vale para lo que titularon El estado plurinacional, claro que si fuera pícaro podría ponerme a filosofar sobre “El estado plurinacional... “ que es una definición tan chicle como la de los nazis en ese entonces  con “las fronetras ideológicas, porque las geográficas no existen”. Y el final ya lo conocemos.

La opereta boliviana va tomando dimensiones que ya son desagradables, porque así vamos demostrado al mundo que somos un estado no confiable, donde todo es posible y todos hacen lo que quieren, entonces claro que nos tienen que tener  miedo si compramos 20 cohetes chinos con una precisión de 50 km ¿no?  Y si nuestros soladados pierden la orientación y se pasan una frontera que por ahí no exites o no está claramente demarcada, es algo que puede pasar en todo el mundo... en el siglo XXI, donde por medio de un simple celular sabemos exactamente en que latitudes nos encontramos y si esa información es muy abstracta hasta se nos puede mostrar el mapa-guía  de cómo regresar  a casa.

Día a día vemos como el estado se va desmoronando, como van comentiendo errores garrafales, como vamos comentiendo errores garrafales, pero al parecer ni nos importa y seguimos por el mismo camino, con la misma meta, con la misma consigna de seguir viviendo en a forma que  lo hacemos, con 30 mil bailarines, con más de 30 mil autos chutos, con miles de toneladas de ropa usada, con miles de casas chutas, de documentos chutos, de kilos de droga chuta, de políticos chutos y quién sabequé más.

Ok, dieron nuevamente un paso para atrás y los autos viejos pueden seguir circulando. Viejo no es sinónimo de chatarra, por lo que si todos esos vehículos están en perfecto estado técnico y cumplen con las normas para no envenenar al medio ambiente con sus gases, pueden seguir circulando, ningún problema, ¿pero lentamente nos tenemos que preguntar por qué salen “normas” propuestas por el gobierno que luego tienen que ser amoldadas a los intereses de ciertos grupos? ¿Y qué tiene que ver esto con nuestros soldados presos en chile?  Nada, en nuestra realidad el caos, el desorden, la mala organización, el mal gobierno han convertido la vida diaria en un revuelto de porquerías, donde los vivos engordan y los demás al pedo...

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